Responsabilidad social fue un término que se puso en boga hace algunos años, y llegó para quedarse. La razón: las personas ahora se mueven con causa, y prefieren consumir en empresas que hagan algo por la sociedad, desde plantar árboles anualmente, no probar sus productos en animales o ayudar a ciertas causas o fundaciones.
Se ha convertido en un punto de preferencia, como si dieran el extra, sin embargo, ayudar, en especial con procesos que no cuestan a la empresa debe ser parte de la cultura, claro es responsabilidad porque hacen lo que les toca, pero no es un plus.
Y aún con esta moda para colocarse entre las preferencias de los consumidores, 66% de las personas en México, consideran que las empresas no son socialmente responsables con su ambiente.
Para ser responsables con el ambien basta con reducir los desechos, tal vez recopilar aguas pluviales para uso en el WC, o cualquier actividad que reduzca el impacto ambiental y el desperdicio innecesario, que además de todo genera ahorros en la empresa y hasta incentivos fiscales.
La lucha por ligar a las empresas con el medio ambiente y obtener una relación sana y sólida se viene dando desde hace ya varias décadas, no es casualidad que el nacimiento de la Organización de las Naciones Unidas y organismos similares hayan servido de punta de lanza para crear en nuestros días una verdadera sinergia entre las empresas y la responsabilidad social.
Cada vez resulta más evidente la preocupación que muestran las grandes potencias mundiales en cuanto a este tema, pese a esto un estudio realizado recientemente por De Las Heras Demotecnia señala que el 66% de los mexicanos considera que las empresas en México no se encuentran comprometidas con el cuidado del medio ambiente respecto a otros países.
En el mismo renglón el estudio señala que el 54% de los encuestados considera que algunas acciones de las empresas como el ahorro de luz, agua o reciclaje son solo una manera de ahorrar dinero.
“Aunque aún falta mucha tarea por realizar en todo lo relacionado con el medio ambiente y el terreno empresarial, debemos estar conscientes que un buen manejo del mismo resulta crucial para el crecimiento económico y humano en cualquier partitura”, puntualizó Pérez Berlanga; Director del Área de Responsabilidad Social de Grupo Toks, grupo que tiene más de 40 proyectos ecológicos, como el cambio de sus lámparas para reducir la contaminación por generación de energía eléctrica.